Esta entrada está motivada por el video, que podéis disfrutar al final de ella, del Maestro artesano Xavier Amargant. Sin embargo, al concretarse en una de las plumas más emblemáticas de las que en su día se fabricaron y pertenecer a una de las empresas más señeras dentro del mundo de la pluma, nos permite hacer esta breve reseña sobre ella, que en el futuro prometemos mucho más extensa.
La línea 100 de Pelikan constituyó el estreno dentro del mundo de la fabricación de plumas de la muy reputada fabricante de tintas GÜNTHER WAGNER.
Como no podía ser de otra manera, ese salto vino de la mano de una aportación técnica y no precisamente menor: el sistema de carga por émbolo. Y esta circunstancia fue debida a las reticencias y retrasos en aceptar ese sistema dentro de su fabricación por parte de otra empresa importante de la época (años 20). Nos referimos a PENKALA, (que podéis encontrar en Marcas de Plumaemocion), ofrecido por su inventor, Theodor Kovacs, que finalmente cerró tratos con Pelikan. Así llegó, como el propio de su “100”, y de la mano de Pelikan, al mercado, revolucionando en poco tiempo a todo el mundo alemán de la pluma primero y seduciendo al resto en las siguientes décadas.
Fotos cortesía de Plumaemocion provenientes de la Red y de su Web.